domingo, 16 de abril de 2017

Guías espirituales y seres de luz en las Constelaciones Familiares

Contactos en las Constelaciones Familiares

Guías espirituales y seres de luz en las Constelaciones Familares
Un ser de luz en la constelación familiar del libro
"Constelaciones Familiares y Tarot"
Cuando asistimos a un taller de Constelaciones Familiares nos disponemos a tomar contacto con los familiares y antepasados de las personas que constelan.
Serán los representantes quienes sentirán en sus cuerpos sensaciones desconocidas para ellos y expresarán frases que les son ajenas a sus vidas.
Otra situación no tan frecuente y sumamente fascinante, es la presencia de guías espirituales y seres de luz en las Constelaciones Familiares.
En este blog, existen varias entradas relacionadas con el tema y revisándolas podemos comprobar cuáles son los elementos que caracterizan a este tipo de constelaciones. 

Ver con los ojos del alma, sentir con el corazón

Recientemente en Candeleda, Prov. de Ávila, tuve la oportunidad de conducir un taller en el que nuevamente se manifestaron este tipo de entidades.
La constatación de estas presencias fue realizada por Isabel, la Sanadora número 8 del libro "Sanadores, un camino alternativo" y su esposo, quien lleva varios años trabajando con ella en las sanaciones a distancia.
Para aquellos que aún no tenemos esta capacidad perceptiva de ver con los ojos del alma sólo nos bastó con observar las sensaciones y palabras expresadas por una de las representantes, contagiando al resto del grupo con emociones de paz, plenitud y felicidad.
Sentir con el corazón lo que allí se estaba viviendo fue como adentrarnos en un sitio donde sólo se respiraba aire puro y, pese a la simpleza del fenómeno, nadie podía dejar de alegrarse por ello.

Constelación para el libro "Constelaciones Familiares y Tarot"

Aplicando una técnica de sanación en una
Constelación Familiar
Todos mis libros han sido constelados, ya sea para la elección de los sanadores, la ordenación de los capítulos, la edición, distribución y finalmente, para la buena acogida y aceptación del público.
En esta ocasión, la constelación estaba dirigida a Elena Lechiguero, la tarotista que comparte conmigo la escritura de nuestro próximo libro: "Constelaciones Familiares y Tarot".
Decido que ella misma participe dentro de su constelación y elijo participantes para que representen a mi persona, al libro, al Director de la Editorial y  a la Directora Comercial.
Mi representante explica al Director las razones por las cuáles se están escribiendo el libro y hacia qué tipo de público está dirigido.
Seguidamente, la Directora Comercial se adelanta y pega con el codo un suave empujón al Director para enterarse más de cerca en qué consiste el libro. "Quiero escuchar", dice ella.
Mi representante vuelve a empezar con la explicación y, ambos, Directora y Director, expresan que hay algo que no encaja, pero se sienten mejor con una palabra de la disertación: autoayuda.
En ese momento, uno de los observadores percibe un conflicto en el Director y desde su silla explica en voz alta los detalles de su percepción: "El Director está cerrado, tiene bloqueado uno de sus chakras". 
Lo invito a que participe en la constelación y aplique alguna de sus técnicas de sanación para la apertura de chakras y desbloqueo de emociones.
Así lo hace y el Director puede mirar mejor al proyecto. 
Mientras, la Directora dice querer ver terminado el libro porque le falta más información para valorar.
Las autoras, asienten y reconocen que tienen que ponerse las pilas.
Pregunto a cada uno de los representantes cómo se sienten, siguiendo el protocolo de la metodología que expongo en mi libro "Manual Práctico de Constelaciones Familiares".
Todos están bien, salvo la autora que constela. Tiene reparos en darse a conocer. Sabe que este proyecto puede significar una apertura hacia el mundo. Siente miedo.
Le pregunto qué necesita para que el espacio que hay entre ella y el libro sea más cercano y responde: "Seguridad".
Coloco un representante para la seguridad y éste se ubica detrás de la autora.
En un instante, el representante abre sus brazos con las palmas hacia arriba como protegiéndola y, seguidamente, su semblante comienza a cambiar, se distiende, sonríe y respira cada vez más profundo.
Al mirar al grupo, detecto que todos están con idéntica reacción, sonrientes, respirando hondo y felices...
Observo cómo la autora se apoya en ese representante que la acoge, a quien pregunto: "¿Eres un hombre, una mujer o una cosa?" 
El representante, abre cada vez más sus brazos y responde: "No soy una persona. Soy..., soy..., ¡soy un Ser!".
Le explico a Elena que tiene detrás un ángel y ella comienza a avanzar, sintiéndose más segura.
La Directora expresa que falta algo en la tapa del libro y alguien del grupo sugiere colocar un agregado como subtítulo.

La solución final

Guía espiritual en una Constelación Familiar
Propongo que todos escriban un subtítulo en unos cuartos de folios que entrego a cada uno.
Así lo hacen y colocan su propuesta en un caldero que encuentro dentro de la sala.
Le pido a la representante de la Directora que escoja un papel entre todos los que hay mezclados en el caldero.
Cuando lo elige, Elena y yo lo abrimos y leemos en silencio.
Ambas nos miramos satisfechas.
¡La solución no podría haber sido mejor!

Bibliografía:

"Manual Práctico de Constelaciones Familiares", Alejandra Mitnik, autoedición

Próximas formaciones en Constelaciones Familiares:

España: Barcelona, Bilbao, Gran Canaria, Tenerife, Ávila, Valencia
Argentina: CABA, La Plata, Córdoba, Rosario, Santa Fe
Información: alejandramitnik@yahoo.es